La historia de Marcos Galperin y Hernan Kazah es una fuente de inspiración para todos los emprendedores latinoamericanos. En 1999, estos dos visionarios fundaron MercadoLibre, una empresa de comercio electrónico que hoy está valuada en más de 60,000 millones de dólares. Pero su éxito no se limita a los logros de su propia empresa. Galperin y Kazah han utilizado su éxito para ayudar a más emprendedores y han creado una red de apoyo y una comunidad que se extiende por toda América Latina.
En el caso de MercadoLibre, el liderazgo y cultura empresarial de los fundadores ha inspirado a 90 antiguos empleados a fundar ellos mismos sus propios proyectos. Además, Galperin ha proporcionado mentoría a más de 20 emprendedores y ha invertido directamente en otros 25, mientras que Kazah fundó Kaszek Ventures, una firma de capital de riesgo que ha financiado no menos de nueve empresas unicornio y alrededor de 100 empresas más.
Pero este no es el único ejemplo. La “mafia de Rappi” es reconocida a nivel mundial, con algunas firmas de capital de riesgo estimando que más de 100 nuevas empresas han surgido a partir de la empresa. Por otro lado, los fundadores de Globant han desencadenado uno de los efectos multiplicadores más grandes, pues han inspirado a más de 600 fundadores; aunque un reporte de Endeavor afirma que un solo fundador puede inspirar a más de 700 fundadores en una región.
Por otro lado, en Estados Unidos, PayPal ha sido un ejemplo similar de cómo antiguos empleados han fundado empresas exitosas como Tesla, LinkedIn, SpaceX y Yelp, entre otras. Estos emprendedores han creado empleos y riqueza, y han cambiado la forma en que hacemos negocios.
Esta es la maravilla del Efecto Multiplicador, el cual no sólo se refleja en la cantidad de nuevos emprendimientos que resuelven necesidades urgentes de la población y que surgen a partir de un caso de éxito y una inspiración previa. Este efecto se puede observar también en el impacto económico positivo que tienen los emprendedores y en el ejemplo que establecen para la siguiente generación. Al final, termina siendo un impacto compuesto y exponencial en la economía de una región cuando mentorean, invierten e inspiran.
Cuando una red de emprendedores se basa en un enfoque de Efecto Multiplicador, fomenta una cultura de apoyo mutuo y colaboración, lo que a su vez puede ayudar a superar algunos de los desafíos más comunes al emprender, en especial la falta de acceso a financiamiento y la burocracia excesiva, como es el caso de América Latina. Así que debemos celebrar la contribución de los emprendedores y apoyar a la siguiente generación para que continúe construyendo un futuro próspero para cualquier economía.
Contar unicornios es gratificante. Para cualquier economía es un orgullo generar una empresa que pueda cambiar el rumbo. Pero, ¿qué tal si en vez de solo concentrarnos en los unicornios, nos detenemos a pensar en las enormes posibilidades de cambio que empresas con ese status y otras más pequeñas pueden generar?
¿Qué pasaría si contamos el resultado del Efecto Multiplicador de más de 2 mil emprendedores? Hoy Endeavor opera en 42 mercados y ha ayudado a 2,400 emprendedores en su viaje hacia el crecimiento. Sin duda, habrá mucho que contar sobre el impacto positivo que cada uno de estos emprendedores ha generado a pequeña y gran escala en cada una de sus comunidades alrededor del mundo.
